Construcción Lineal: Cisco Merel
La trayectoria artística de Cisco Merel lo ha llevado a caminar por las fronteras de su propio discurso continuamente en revisión y transformación. Su trabajo se ha paseado entre lo figurativo y lo abstracto; entre la pintura, la escultura y los nuevos materiales; entre la solidez de los cuerpos y la concisión de la línea.
La línea es precisamente el elemento fundamental de sus obras más recientes, la unidad básica con la que dibuja su característico vocabulario de formas y color en el espacio vacío. Este uso que tiende a lo mínimo aparece casi como consecuencia natural de sus búsquedas plásticas de los últimos años. Si en la serie de sus Visual Systems había venido depurando su lenguaje para concentrarse en definir los elementos que lo conforman y construir con ellos una sintaxis propia, en las Construcciones Lineales parece llevar aun más lejos ese propósito, al reducir tales elementos al límite de las líneas que los constituyen.
Esta reformulación permite evidenciar la preeminencia que ha tomado en la obra de Cisco la relación de su lenguaje con el espacio, así como la interacción entre los elementos de ese lenguaje como valor generador. Las líneas se cruzan, se funden, marcan espacios compartidos y de contraste. Se presentan así como límite y apertura creativa.
Finalmente, la idea de límite y umbral encuentra asidero en un nuevo conjunto de obras emparentadas con las Construcciones Lineales. En la serie Reflex la línea atraviesa la obra más allá del espacio real y las formas terminan de configurarse en el espacio virtual del espejo. La obra se construye decididamente como intermedio, como entidad incompleta pero completable.
Tal vez lo que caracteriza estas piezas de Cisco Merel sea el concepto de transición. Ha construido un lenguaje de objetos en tránsito continuo entre lo corpóreo, lo etéreo y lo virtual.